El cerebro es muy vulnerable, pero tiene extraordinaria flexibilidad. En un caso asombroso, a un niño le extirparon el hemisferio izquierdo a los 5 años de edad; quedó paralizado del lado derecho y ciego en el campo visual del mismo lado. Pero aprendió a hablar, a leer, a escribir y su nivel de comprensión era tan bueno que se tituló en dos disciplinas universitarias y obtuvo un cociente intelectual por arriba del promedio. ¿Cómo logró esa maravillosa recuperación después de perder la mitad del cerebro? ¿Se re-cableó por sí mismo? La respuesta radica en el concepto de Plasticidad Cerebral.
¿Qué es la plasticidad?
Al tacto, el cerebro humano se siente como gelatina. Los psicólogos no piensan en este tipo de blandura al hablar de la plasticidad del cerebro. Piensan en la capacidad del cerebro para cambiar su estructura y sus funciones. Es interesante señalar que puede “re-cablearse” tras algunos tipos de daño. También forma nuevas conexiones en respuesta a las condiciones cambiantes del entorno.
¿Las conexiones del cerebro son semejantes en todos?
Lo son en las principales estructuras, pues de lo contrario los neurocirujanos no sabrían donde empezar cuando operan el cerebro. Sin embargo este órgano tiene una adaptabilidad extraordinaria. A lo largo de la vida va modificando sus circuitos en diversas formas. Gracias a ello el comportamiento es flexible y eficiente, o ¿ustedes que opinan?
¿Cómo se realiza el re-cableado?
Para aprender una destreza, como por ejemplo, tocar el piano, se requieren muchos cambios en el cerebro. Algunas dendritas se alargan y se ramifican; otras se acortan o se eliminan. Se forman nuevas sinapsis y otras desaparecen. Los niveles de actividad cambian en grupos de neuronas. Durante esos procesos partes de la corteza son “re-cableadas” para que realicen los procesos mas eficientemente. A lo largo de la vida nuestras experiencias literalmente moldean y re-moldean los detalles del cerebro.
Lesiones del Cerebro
La plasticidad ayuda a las personas a recobrar algunas habilidades perdidas tras una lesión. Supongamos que un hombre, digamos de unos 50 años, sufre de un infarto cerebral en el hemisferio izquierdo. Ocasionando una parálisis en el lado derecho del cuerpo y no puede escribir ni hablar coherentemente. ¿Estará en condiciones de recobrar las habilidades perdidas? Por fortuna, muchas personas mejoran al cabo de algunos meses, y gracias a la plasticidad del cerebro, las áreas sanas pueden sustituir a las dañadas.
Los niños tienen mucha mayor plasticidad que los adultos. Por ejemplo, si el hemisferio izquierdo que severamente dañado, los niños menores a 2 años pueden trasladar el procesamiento del lenguaje al hemisferio derecho. Si el daño ocurre entre los 2 y los 6 años de edad, nuevas áreas de lenguaje tienden a desarrollarse en ambos hemisferios. Cambios tan radicales en el procesamiento del lenguaje son más difíciles en la edad adulta.
Los psicólogos solían pensar que en general era imposible “ejercitar” el cerebro. Sin embargo los estudios de la plasticidad indican que el cerebro “o se usa o se pierde”. Cundo se utiliza en formas novedosas o estimulantes, su tamaño crece y también el número de ramas dendríticas que contiene. Cuanto más lo estimules y ocupes, sobre todo para aprender destrezas, más sano será y mejor funcionará.
Video
Estimados lectores, los invito a ver el siguiente video sobre plasticidad cerebral.
La liga es la siguiente: